La Feria ARCO es un mercadillo, un espacio enorme en donde las Galerías de Arte ofrecen sus productos. Es Arte, pero podrían ser filetes de vaca vieja o alfombras persas. Pero no, es Arte.
Esto hay que tenerlo en cuenta para entender el fondo de la idea. Se trata de vender, de comprar, de invertir, de explorar mercados e ideas, de crecer o hundirse.
Todos los años hay obra reconocida y muy cara, hay obra barata para iniciarse, y hay obra escandalosa para salir en los papeles. Ingredientes de una gran sopa en donde algunos destacan, abren ventanas y caminos, y otros hacen de liebres.
Sobre todo ARCO sirve para conocerse, para ver tendencia, para observar los cambios y ver qué se cae y qué emerge como novedad.
La pintura no ha muerto, o al menos no ha muerto la pared como soporte de Arte, creo que seguimos apostando por mezclas de pequeños tamaños que hacen un gran tamaño, y nadie es capaz de comprar en los mercadillos aquello que ocupa mucho espacio, mucho volumen.