Los llamados Libros de Horas eran libros religiosos que se hacían por encargo y de forma artesanal, escritos y dibujados a mano, para las grandes familias poderosas de la Edad Media. En España y en la Europa católica fue algo muy habitual, sobre todo entre las mujeres de la Corte o de familias con poder territorial y económico, y los utilizaban para rezar como si fuera una Biblia personalizada.
Este dibujo, esta ilustración es del Libro de Horas pintada por el maestro escritor de y para Isabelle Marguerite de Willerval, nacida en el año 1380.
Este Libro de Horas ricamente iluminado con 13 miniaturas grandes, nos muestra una mirada de la devoción femenina en la Francia del siglo XV, combinando el esplendor de las Cortes europeas con la contemplación tranquila.
Creada por el prolífico Maestro de Marguerite de Willerval, esta copia ricamente iluminada ejemplifica el estilo característico de la producción de manuscritos bretones del siglo XV.
El Maestro anónimo tenía su sede en Rennes, en el ducado de Bretaña, y a veces se repetía escenas religiosas con diferentes variables, lo que permite saber desde qué talleres se hacían los Libros de Horas.