Esta pintura al óleo es de un seguidor de El Bosco pintada a finales del siglo XV, y titulada "Ángel acompañando a un alma al infierno". Como podemos ver, en aquellos años el Infierno era aterrador, pero sobre todo era aterrador el camino, pues los que te metían en el fuego eterno antes te castigaban terriblemente.
Esas torturas eran realizadas por enviados de Dios, por soldados de su Divina Orden, así que sin duda: ¡¡Jodo!! con las bondades de los que decían hacer Justicia. Era una manera en aquellos siglos de hacer propaganda para que las gentes fueran buenas y obedientes.
Hay que tener en cuenta, eso también, que no eran cuerpos humanos, sino almas, así que es posible que no se sufriera tanto para entrar en los infiernos de aquellos siglos. ¿Cómo sufre un alma?
Ahora ya, pues eso, sabemos que el infierno no existe. ¿O sigue existiendo? ¡¡Uff!! Y qué manía tenían con arrastrar a las mujeres de los pelos.