Este cuadro de Juan de Pareja titulado "La vocación de San Mateo" lo pintó el andaluz en el año 1661 y se encuentra en el Museo del Prado. Con sus más de tres metros de anchura es un gran cuadro que nos muestra una escena bíblica.
Jesucristo aparece en la Oficina de Recaudación de impuestos de Cafarnaúm y llama a Leví (a partir de su conversión se llamaría Mateo) para que deje lo que está haciendo y le siga a predicar sus palabras entre los más necesitados.
San Mateo que lo vemos con la mano en el pecho y una luz blanca sobre la cabeza para indicar que es el elegido, duda sin saber en esos momentos que finalmente será uno de sus más importantes discípulos y el autor de uno de sus Evangelios aunque en los últimos años hay dudas al respecto.
La escena es fotográfica, y sí, del año 1661, en donde vemos la habitación según el estilo del siglo XVII y no del siglo I, los recaudadores, personajes diversos, que observan y acuden para cumplir con su obligación, dos o tres apóstoles que acompañan a Jesús, e incluso al propio pintor Juan de Pareja, a la izquierda y mirándonos a nosotros, con un papel en la mano en donde está su propia firma.
Es curioso también el aprendiz de la escena llevando el libro de apuntes de los pagos. O los vestidos de todos ellos, bien diferenciados entre los de los personajes todavía sin convertirse que llevan ropas del siglo XVII y Jesús y sus Discípulos que llevan ropas del siglo I.
