El cuadro se encuentra en un magnifico estado de conservación es un cuadro inédito hasta época reciente y permite conocer mejor la pintura religiosa de un joven Goya. Mide 83,5 de altura x 58 centímetros de anchura y conserva su tela y bastidor originales, y apenas ha sufrido intervenciones.
La obra se ha fechado entre 1772 y 1774, por lo que es un testimonio relevante sobre las fuentes de inspiración que el aragonés recogió de su viaje a Italia del que volvió en 1771, donde pudo conocer ‘La Piedad’ de Miguel Ángel y otros modelos de Carracci, Maratti y Giaquinto. Goya tendría entre 26 y 28 años de edad cuando lo pintó.