11.1.24

El grafiti se traslada a New York. Jean Michel Basquiat


La historia del grafiti se traslada a New York en el año 1977 marcando hasta el año 1980 el punto en la historia del grafiti con el legendario Jean-Michel Basquiat que llamó la atención del público neoyorkino por primera vez con su grafiti SAMO en las calles de la Gran Manzana.

Aunque solo se asoció con Basquiat, en realidad se desarrolló junto con sus amigos de la escuela secundaria: Al Díaz y Shannon Dawson para hacer un cómic.

Compartió como comentamos y junto con su compañero inseparable, Al Díaz, el pseudónimo: SAMO, (las siglas de Same old shit), es decir, «la misma mierda de siempre», «la misma porquería», y llamando a su marihuana precisamente como "la misma mierda de siempre", más tarde acortada a "la misma vieja", y luego finalmente SAMO, con el que ambos firmaban sus tags y graffitis, con mensajes crípticos añadidos, algo que fue decisivo en su vida.

El graffiti tomó la forma de frases cortas, generalmente poéticas o sarcásticas, y fue creciendo en el área de Manhattan de la ciudad de Nueva York. El grafiti comenzó a hacerse notar, pero Al Díaz quería permanecer en el anonimato mientras Basquiat disfrutaba de la atención y fama creciente.

A partir de 1977 Basquiat comenzó a practicar el graffiti en los vagones del metro y en fachadas del barrio del Soho, zona donde hay numerosas galerías de arte. Abandonó su casa y vivió durante dos años en la calle, en casas abandonadas, pudiendo sobrevivir gracias a las camisetas y postales, que pintaba y vendía. A la vez que continuaba con el grafiti, escribía de forma poética, filosófica, pero sobre todo, practicaba la sátira.

Basquiat mató el grafiti suyo con un último SAMO IS DEAD en 1980 cuando su carrera en el mundo del arte comenzó a despegar y sus relaciones con el nuevo mundo comercial del Arte Contemporáneo le abrieron otras puertas. Fundo el grupo musical Gray en el que tocaba el clarinete y decidió abandonar el Arte Callejero.

Fue a partir de ese 1980, cuando aún continuaba su vida de vagabundo aunque venía de una familia estructurada a la que había abandonado, cuando comenzó a dedicarse en serio a la pintura, sobre todo el expresionismo abstracto.