Dentro de la fotografía surrealista, del expresionismo incluso abstracto, hay mucho campo para explorar, para trabajar y mostrar que la fotografía es un campo artístico tremendo, que con su importancia única en relación a otras artes, debe ocupar un espacio en aumento dentro de los museos y salas de exposiciones.
Hay que salir de las redes y de las miles de imágenes que se van colgando en ellas, para ir ocupando otros espacios expositivos, más acorde con la calidad de los productos que se realizan.
El Arte no puede ser tan efímero que solo esté unos segundo en el campo de la contemplación. ¿Qué queda hoy de lo que se publicó en redes hace unas semanas? Si una obra es buena o incluso si es regular, deberían buscarse modos menos efímeros que unos segundos de publicación.
Para que algo se vea, deben coincidir los seguidores en esos segundos con lo publicado, o ser realmente un fijo de ciertas personas para que te lo vuelvan a mostrar en el mismo día.
¿Dónde se conserva en la memoria colectiva, lo que publicamos ayer? Algo tendríamos que modificar en nuestros hábitos, para que todo no fuera un consumismo tan efímero.