27.3.22

Mare de Déu amb el Nen de Oliola en Lérida


De finales del siglo XII o de principios del siglo XIII podemos ver una talla que al menos tenía algunos detalles recubiertos de metal y que al tener resto de policromías debió estar coloreada, de la iglesia de Santa María de la localidad de Plandogau de Oliola, Lérida.

Se trata de una Virgen en madera recubierta de una aleación de plomo, con restos de policromía al temple visibles especialmente en el trono, de dimensiones relativamente modestas de poco más de medio metro de altura. La Virgen está sentada sobre el trono en forma de asiento cúbico, con el interior calado. El Niño está en su regazo totalmente centrado. 

Ambos personajes lucían coronas de tipo imperial carolingio, que han perdido los florones correspondientes, si bien muestran claros vestigios de haber poseído aplicaciones de pedrería como también se aprecia en puntos de las vestimentas respectivas. 

La Virgen María va vestida con casulla y túnica, mientras que bajo la corona luce un velo. Es remarcable la decoración de la casulla, a base de motivos florales en relieve, quizás obtenidos mediante yeso o estuco. Con la mano derecha sostiene un motivo esférico, identificable como una manzana, mientras que con la izquierda parece sujetar la figura del Niño. 

El niño por su parte va vestido con túnica y manto, mientras bendice con la mano derecha y muestra el libro con la izquierda, cerrado y en horizontal. Bajo los pies de María, en el pedestal, se lee la inscripción mater dei. 

Las superficies en metal se desarrollan mediante un trabajo sutil, basado en la elegancia de los pliegues de la indumentaria, en el tratamiento de la faz de la Virgen y en la ornamentación desaparecida de las orlas de la indumentaria de ambas figuras, ya citada. Tanto en el trono como en la parte posterior de la figura hay restos de policromía aplicada al temple. ¿Fue una imagen muy importante en su época y que se pudo traer desde otros países por su forma de trabajarla?