Esta pequeña obra es de Francisco de Goya y está titulada como "Martirio de San Lorenzo" siendo un óleo de un 11 centímetros de diámetro, que no está en muy buenas condiciones, sobre todo por su pequeño tamaño y sus muchos años pasados pues fue pintado sobre 1760 a 1770 en su época joven.
En un lienzo con los hilos colocados diagonalmente, lo cual no es habitual nunca vemos en el primer término a un San Lorenzo sobre la parrilla y con el paño tapando en diagonal, recordando al Cristo muerto de la Trinidad de Conrado Giaquinto del Prado, mientras que en la parte superior vemos como suspendido en el cielo un Ángel con la palma del martirio para mitigar su dolor mientras le premia con una corona de flores.