Y en esto nos quedamos, en el mejor de los casos. Esta calavera ha tenido la suerte de gozar de los colores, de ser pasto de los líquenes y parecer algo incluso después de limpia y seca. No todos podremos decir lo mismo. La vida es así de seca, todos nos veremos así en algún momento.
Claro que… lo de vernos así, es una idiotez pues con las cuencas de los ojos vacías de sustancia, no nos veremos de ninguna manera. Ni nos veremos ni nos verán, pues tampoco nos permiten quedar tirados en medio del campo a la suerte de los bichos diversos. Nos pudriremos con animales tasados y no al libre albedrío, que esa es otra.
Al final queda claro que lo de: "Polvo eres y en polvo te convertirás" es una de las últimas fases, pero para ello han tenido que pasar por varios purgatorios anteriores.