Los cuervos son muy puñeteros pues se saben defender e incluso si ellos quieren parecer buenos bichos. Eso depende del día o de su templanza. Hay veces que los vemos asomados a una ventana y otras asomados a una película. En todos esos casos siempre asustan un poco. Debe ser por el color. No hay cuervos blancos ni de colorines, lo cual es curioso. Tal vez el cuervo que nace blanco alguien decide llamarlo de otra forma, incluso paloma. Tampoco lo sé seguro.
Un cuervo antes de moverse observa su alrededor y así decide a dónde ir sin equivocarse mucho. Sabe volar hacia su objetivo sin perder su capacidad de sorprender o de incluso asustar. Por eso lo mejor es siempre verlos quietos agarrados a una rama o andando por el suelo entretenidos buscando grano. Dicen que pican. ¡Uff!!