El artista mexicano Diego Rivera nos dejó este dibujo litografiado titulado "El niño del taco" realizado en el año 1932. Un ejemplo del poder del dibujo, en este caso como boceto previo a la construcción de murales que fueron su constate artístico.
Todos los artistas cuando construyen grandes obras, antes suelen hacer bocetos previos de escenas de la obra, de personajes, de "trozos" de la composición final, para luego encajarlos y muchas veces modificarlos con arreglo a la totalidad de la obra.
Diego Rivera creaba personajes y escenas de la base social de México que nos muestran el candor, la dureza social, otras miradas de sobre todo personas que nos llegan muy adentro.