Cuando acudimos a una persona y no está abierta, simplemente nos encontramos con el vacío.
Si no está lo que esperas, lo que observas está cerrado o negro… es el vacío o la nada, aunque tenga forma, voz o color.
Si no te sirve, si no es lo que deseabas imaginarte…, lo que hay… no sirve de nada. Es simplemente el vacío.