Tal vez incluso las propias gotas de agua sean como nosotros…, simples buscadoras de compañía.
La soledad no es mala, simplemente es que: o la sabemos planificar muy bien o resulta aburrida.
Buscar la otra gota de agua es complicado, pues no sabemos dónde está. Pero no dejes de jugar a buscarla.
Tienes todo el año para buscar y encontrar.