Algo cerrado permanentemente es algo más que muerto, es algo que ya no existe, que nunca más tendrá sentido, que se ha perdido incluso en el recuerdo.
Permanentemente es el deseo de olvidar que ha existido. Es la nada, el cero. Es un para siempre nuestro y tal vez para el de todos, incluido el futuro.
Pero bien mirado… no tiene sentido un cartel tan bien diseñado en la puerta de un local comercial advirtiendo que ahora ya… estaba cerrado permanentemente.
Hubiera sido más lógico no poner nada o escribirlo a rotulador de mala hostia. No sé qué busca con este texto.