Pilló a Alfredo Pérez Rubalcaba que hoy mismo nos ha dejado, hablando con Narcís Serra en algunos pasillos habituales. Pero lo hermoso, lo literario son las sombras de ambos.
Ambos eran personajes de la vida política más densa y tal vez escondida, los clásicos fontaneros de hacer y no decir. Trabajar en silencio, como fantasmas, escondidos entre las sombras alargadas de sus figuras.
Ambos eran personajes de la vida política más densa y tal vez escondida, los clásicos fontaneros de hacer y no decir. Trabajar en silencio, como fantasmas, escondidos entre las sombras alargadas de sus figuras.
Y eso es lo que José Aymá supo retratar en esta bella y literaria fotografía. A un Rubalcaba que hoy se nos ha ido con todos sus secretos.