Arte Urbano que nos muestra un lobo (o zorro) de los muchos que pululas por las grandes ciudades. Y por las pequeñas. Un lobo de los buenos, de los que solo muerden. Un lobo natural aunque esté hecho de basuras y desechos, pero que al final y para nosotros sigue siendo un lobo de lo más natural.
Luego, en las ciudades y en los pueblos, hay otro tipo de lobos, mucho menos artísticos, menos coloristas, mucho menos amables por dentro aunque sonrían por fuera.
Es lo que tienen las ciudades de todos los tamaños. A los lobos peligrosos nunca los vemos mirándonos a los ojos.