Si alguien se te queda mirando fijamente y con insistencia, incluso con un pequeño toque de chulería…, tienes pocas oportunidades de entablar una conversación. Si además es una gaviota, las posibilidades decaen.
Así que no le dije nada y me quedé inmóvil, no fuera a quererme demasiado. Recibir un beso de una gaviota recién duchada no me pareció agradable esa mañana.