La luz es el todo, es la que realmente pinta la miradas. Sin luz no existe nada. De la luz emanan los santos o los monstruos, la belleza y la fealdad. En la luz estoy yo y tu, pero sin ella desaparecemos aunque sigamos estando. Con luz miramos y con luz nos ven poco después de mirarnos.
La luz es el anti silencio, pues es la que grita.