El fotógrafo Enrique Sáenz de San Pedro nos dejó en este verano 2017 una exposición en Madrid con sus obras fotográficas en blanco y negro que sin duda merecen una reflexión y una doble mirada. Con el título “Donde la ciudad termina” nos muestra esa mirada certera del vacío dpe la ciudad tras acabarse, de la necesidad vital de las personas de escapar para encontrarse con el campo, con la naturaleza, con incluso su soledad.
Son imágenes del año 1975, de un español que llegaba a Madrid tras una década en Londres y que se encontró con una ciudad que hervía crecimiento. La llegada a veces casi artificial de personas que escapaban de sus pueblos, para encontrarse cemento y verticalidad. Necesitaban la horizontalidad de la nada.