Todo cambia, incluso las numeraciones de las calles. Todo cambia hasta marear, hasta lograr que no sepamos bien donde nos encontramos.
Este portal fue el 2 y el 50 y el 36. Al menos todos son pares.
Hoy no sabemos cual de los tres números es el correcto, podría ser el 36 que es el más nuevo o podría ser otro. También las calles se estiran y se encogen.