Formas al viento, colores reflejados, miradas torcidas, sensaciones de vértigo. Tal vez sea así cómo nos ven los demás, o incluso como nos vemos nosotros mismos. Nunca es posible asegurar de qué forma quedamos reflejados dentro o fuera de nosotros mismos.
¿Tumbados y derrotados o tumbadas para descansar y contemplar?