Podríais pensar que me he vuelto loco, y no, venía loco de casa. Es una obra de arte y anónima. Son cadáveres fosilizados de peces prehistóricos agrupados aleatoriamente en una superficie que asemeja a un lienzo. Ya vamos bien.
Ellos no supieron nunca que terminarían en un museo, en este caso en el museo de la Universidad de Birmingham, pero les debió de dar igual. El caso es que se asemejan mucho a muchas pinturas abstractas de este siglo XX y XXI.
Un lienzo, un espacio, una basa, unos elementos que de forma aleatoria cubren ese espacio, dotando de vida y movimiento algo plano e inerte. Es como un pequeño caos provocado por un artista, en este caso se llama Naturaleza con dosis de casualidad y un poco de aleatorio momento final.
Muchas obras de estas décadas, obras caras por supuesto, no tienen la calidad plástica de esta otra obra mezcla de teatro, pintura y perfomance. Por eso está en un museo.