El cuadro de Pierre Auguste Renoir titulado “Les baigneuses - Las bañistas” es un desnudo típico de este artista impresionista francés que en los últimos años de su vida y con fuertes dolores en las articulaciones, nos deja una visión suya de los paraísos ensoñados donde los dioses entregan naturaleza, señoras hermosas y aire puro junto al agua donde retozarse.
En esta obra ya estaba Renoir enfermo e intenta demostrar que el dolor no es quien debe atraparnos, que hay que derrotar a la enfermedad al menos, en sueños. Le cuesta mucho pintar con los dedos entumecidos, pero sigue trabajando con pinceles, ayudándose con diferentes técnicas.