No está permitido todo, pero se puede hacer todo.
Más en el mundo creativo, donde la exploración es una de las obligaciones básicas.
Explorar es buscar nuevas metas, y es también no encontrarlas.
Pero explicar el camino recorrido y mostrarlo, cabe dentro de ese ejercicio.
El final no encontrado es también un final.
Errar es un final, incluso a veces mejor final que encontrar la luz.
Si nos paramos en medio del camino…, vamos bien.
Si no somos capaces de comenzar el camino, por pensar que no conduce a ningún lugar, nos hemos rendido antes de empezarlo.