Te pillé pensando, tal vez soñando, no fuiste buscando sino que yo pasaba por allí. No parecías cansada sino ensimismada en tí misma, como metida hacia dentro. Nunca sabremos nadie qué pensabas en ese momento, ni tú misma si por esos imposible te volviera a encontrar enfrente de mis miradas con cámara. Tú…, no sabes que hoy estás aquí, ni te lo imaginas, pero lo estás y nunca lo sabrás. Es posible que seas inglesa, tampoco estoy seguro, y que aquella mañana estuvieras reventada por algo. No podrás contárnoslo, así que haremos lo bonito, lo fácil, imaginárnoslo. Que cada uno se imagine los motivos por los que esta mujer en la ciudad de Birmingham está descansando de sus ideas.