Usar lo usado. ¿Usamos lo que ya sabemos que sirve para ser usado? Preferimos lo nuevo aunque no sepamos bien qué uso le vayamos a dar. Usar es emplear, es utilizar, es lograr, es acariciar y con suavidad poder disfrutar de su uso. Usar es disfrutar también, pues pocas veces usas aquello que sabes doloroso. Usas es gastar, pero hay cosas que aunque las uses mucho nunca se acaban, nunca se agotan. Si acaso se transforman. ¡Usémonos más!