El MOMA de New York ha cerrado la exposición de la artista
Maria Lassnig de 94 años de edad, con una retrospectiva generosa de su pintura
de los últimos años, donde siempre busca representar sus traumas corporales, su
interior, sus propios auto retratos internos que desde unas técnicas muy
personales dibujas con color sus dolores y sus gozos, sus visiones y sus
carencias según la edad iba avanzando en su obra. Nunca empleó la fotografía
como elemento de referencia para sus obras, sino espejos donde se reflejaba y
elegía el punto de vista del momento según su particular sensación momentánea.