Esta obra artística es una “Caja de rutinas”, de objetos
cotidianos que unidos en una posición que distribuye los espacios crea sin
darnos cuenta un espacio artístico. En realidad son 120 vasos que cada uno de
ellos contienen un texto en un acetato impreso con las aportaciones que une
mujer ha hecho en su vida a la sociedad. Pero podría ser otro tipo de texto o
de contenido. Lo real es que la suma de todo añade un efecto multiplicador y de
más calidad, dejan en este caso de ser 120 mujeres casi anónimas para
convertirse en parte de un todo con más reconocimiento.
Pero lo cierto también, si lo miramos desde otra óptica, es
que al ser textos pequeños depositados en unos vasos que no podemos tocar,
colocados de forma circular, resultan imposibles de leer y por ello de lograr
sacar del anonimato a las mujeres que en ellos se contiene. Es decir, vuelven
sin salir, al anonimato que la artista pretendía destruir.
La obra es de la artista Concha Jerez para el MUSAC de León.