Aline Motta supo captar una imagen espectacular de algo
sumamente anodino y normal. Simplemente nos enseña que el arte se puede esconder
en la forma de mirar, en la manera de encontrar nuevas formas de los elementos
más habituales. Y nos lo demuestra en esta imagen que forma parte de una
colección suya de estos últimos años. El color y las formas aleatorias en
movimiento generan auténticas maravillas simétricas de unos objetos sumamente
habituales. No hay más truco que saber mirar.