Por las calles están escondidos los monstruos que nos miran hasta hacernos temblar pues son los que mueven los hilos de la vida. Nos creemos importantes pues pensamos que somos nosotros los que movemos la vida, peo es un error, son las pequeñas casualidades, las suertes y los miedos, los que nos rodean escondidos, los que en realidad son dueños de nuestros destinos. Que cada uno sufra como quiera.