Naturalmente es artificial.
No la flor; no el árbol que la sostiene; sino la absurda visión manipulada.
A veces deseamos intervenir, trasformar para asemejarlo a algo peor, por eso casi siempre que lo hacemos lo estropeamos.
Pero no podemos evitarlo.
Somos humanos y tenemos que ir estropeando todo lo que tocamos.
Va en nuestra forma de ser.