17.7.13

Pescador de tres cañas grandes con peces embarrados


Era un pescador de río, sobre cenagosas aguas sucias que buscaba peces imposibles y tuertos, pescador de triple posibilidad ante una mañana de primavera cualquiera.

Los peces salían a verle y le sonreían sin dejarse ver.

—Tonto él —se decían— pues si nos pillas no podrás comernos; somos venenosos, basureros, sucios esqueletos de barro pegajoso.

Pero el pescador de triple caña no entendía de ríos de ciudad y si entendía era por que gustaba de simplemente perder su tiempo jugando.