En estos cuadros de paisajes, se cree que Vermeer van Delft empleaba la cámara
oscura para reflejar sobre sus obras todos los detalles del paisaje para así
realizar el primer boceto con una exactitud en las proporciones casi perfectas
dando la sensación de que pintaba al aire libre, cuando en realidad solo tomaba
el primer boceto y luego en el taller o estudio terminaba la obra.
Este
cuadro representa una fachada de la ciudad de Hooch y se realizó empleando un
sistema por entonces novedosa de una especie de punteado. Se puede ver más grande si hace "clic" sobre la imagen.