No creo que fueran a decir nada en especial, pero me parecieron un matrimonio curioso. Una uve doble y una ese juntas y encajonadas separadas por una pared de cartón para que no se pudieran tocar una vez las luces de la exposición se apagaban. Son ganas de joder a las letras, seguro. Una ese y una uve doble. ¿Qué sentido tienen?, me pregunto. No lo sé.