A la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, le han realizado
un retrato oficial por el pintor Paul Emsley, que parece no gustar a los que lo
están viendo por su leve parecido con la mujer de la familia real, cuadro que poco
después de que el retrato fuera mostrado a la sociedad londinense este viernes, en la Galería Nacional de
Retratos en Londres, empezó a recoger un grn número de críticas por su poco parecido y la edad elevada que refleja.
Tal vez la nariz un poco más grande, la sonrisa ligeramente
disimulada, tal vez excesivas arrugas y ojeras, incluso poca luz en la
totalidad de la obra. La mujer es sobre todo una persona muy alegre, que
trasmite con su compleja sonrisa una frescura que no ha quedado fielmente
retratada. Pero también es cierto que casi resulta imposible poder retratar en
un cuadro algo que hemos visto miles de veces en fotografía o vídeo, en donde
la realidad es insuperable muchas veces, sobre todo su es un rostro complicado
de copiar.