Nuestro
genial Goya también hizo apuntes, bocetos de paisajes, dirigidos luego para hacer
grabados, obras más completas o más grandes, trabajos más terminados.
En este caso
dejo una sanguina, debajo de lápiz negro, aguada de lápiz
y tinta de bugalla a pluma de principios del siglo XIX, realizado sobre
papel verjurado un poco ahuesado titulado “La calle”, hoy propiedad del Museo
del Prado pero procedente de la colección de Valentín Carderera, un pintor y
divulgador del Arte de Huesca, que llegó a ser pintor de cámara de la reina
Isabel II.
El dibujo o
apunte representa una vista de Madrid, que según algunos podría ser la calle
Alcalá pero sin toda la seguridad.