Shamsia Hassani es una artista del grafiti en las calles de Kabul, una mujer que pinta sus obras con spray pero vestida de burka en una ciudad llena de ruinas, destrozada por las guerras, ensombrecida y castigada sin saber bien los motivos reales de tanto destrozo a los civiles, pero Kabul es su ciudad y en ella pinta sus mensajes.
Esta mujer joven de 24 años que desarrolla el arte urbano como mejor sabe utilizando el aerosol en las calles y rincones de esa ciudad rota, durante las noches por el miedo a ser detenida, no tanto por expresar lo que siente mediante su arte, sino sobre todo por ser mujer en un país donde las mujeres están asociadas a esa jaula conocida como el burka.
Ella pinta a las mujeres con burka de color azul con burbujas que les salen de la boca silenciosa, pues las mujeres en Afganistán no pueden hablar como los hombres, representando todo un símbolo de la libertad, es un color limpio que indica esperanza.
En un país donde la libertad de expresión brilla por su ausencia, el merito es aún mayor si el grafiti es realizado por una mujer. Lleva menos de dos años pintando paredes, dando vida nueva a las tristes losas que en pie sirven muchas veces de parapetos ante ataques inesperados.
Cuando una pared le gusta pero no se atreve a pintar un grafiti en ella, la fotografía y luego pinta encima de ella el grafiti que desearía poder pintar en la propia pared. La escanea y la convierte en un ejemplo de lo que desearía hacer y que no se atreve ni puede.
Nota.: Tras los últimos acontecimientos en Afganistán (2021) y tras unas semanas sin conocer el paradero de Shamsia Hassani, su agencia comunicó que está segura pero en secreto, y sin actividad de momento. En los últimos años sus trabajos eran ya muy conocidos en todo el mundo. En los últimos días sí ha publicado en alguna de sus redes.