El Arte también puede ser caótico, aleatorio o en busca de la nada; puede ser simple o acomplejado, buscador de espacios vacíos o en cambio estar construido por unos elementos que ocupan los que hasta ese momento, estaba llenos de otros diferentes.
El Arte puede ser todo o nada; o incluso la mayoría de la veces, simplemente puede y debe ser “algo”.
Ser algo, es ser.
No ser nada también es ser.
El vacío está lleno de pequeñas nadas, decididas para que sean eso, nadas.