Gestionada por la Diputación Provincial de Zaragoza, nos muestra ahora, desde el 17 de marzo hasta el mes de mayo, la exposición “Joyas del Patrimonio IV” en donde nos muestras los trabajos de restauración que se han llevado a cabo desde 2003 hasta 2010, sobre todo en retablos y cuadros religiosos de pequeñas iglesias diseminadas por los pueblos de Zaragoza y que van desde el principio del siglo XV hasta el siglo XX.
Es una exposición soberbia, imprescindible para todos los amantes del arte antiguo y/o religioso, mostrando retablos de iglesias diseminadas por el territorio de la provincia de Zaragoza, muchas veces mal conservadas por el paso de los años y las inclemencias del tiempo, maravillosamente restauradas.
Algunos ejemplos, con 600 años de edad, parecen recién salidos de fábrica, mostrando pinturas sobre madera de una calidad espléndida. Imprescindible también para los que deseen conocer el patrimonio aragonés y la gran labor de restauración que se hace desde la DPZ.