19.12.25

La Escuela de Atenas de Rafael


En los Museo del Vaticano tenemos una obra de Arte muy conocida y valorada de Rafael que vamos aver hoy como un ejemplo de obras de Arte pedagógica que tanto ayudaron n sus tiempos a poder ampliar la formación y conocimiento, en tiempos sin las enormes facilidades actuales.

Es la obra: La Escuela de Atenas, pintada en Italia por Rafael Sanzio en los años 1509 a 1511. Habamos de una obra de casi ocho metros de anchura.

En ella vemos unas esculturas en la pared mostrando a Apolo y a Minerva. En el centro andando hacia el espectador vemos a Platón y Aristóteles. Platón (calvo) está sosteniendo el Timeo. Aristóteles sostiene una copia de su Ética a Nicómaco. Debajo de ellos están "retratados" Heráclito y Diógenes sentados sobre las escaleras. Y a la izquierda nuestra mientras observamos la obra podemos ver desde Alejandro Magno a Epicuro, Zenón de Elea, Pitágoras, Telange, Hipatia, Jenofonto, Alcibíades, Sócrates con una túnica verde oliva, o Heráclito sentado y escribiendo.

En la zona derecha según observamos se puede ver a Plotino, Homero, el propio Rafael mirándonos, Ptolomeo, ARquímedes y Estrabón. De algunos de ellos hay dudas sobre si son estos personajes u otros.
Es uno de los frescos más conocidos de la historia del arte y quizás la obra más ambiciosa de Rafael, que quiso representar nada menos que los orígenes del pensamiento occidental, filosofía, historia o geografía, matemática y astronomía, que como todos sabemos nació en la Antigua Grecia.

El artista pinta a los filósofos clásicos y lo hace poniéndoles rostros de artistas contemporáneos. En el centro vemos pues a Platón (pintado como Leonardo) y Aristóteles, las dos principales ramas de la filosofía. Después, están Heráclito (con los rasgos de Miguel Ángel), Euclides (como si fuera Bramante), Protógenes (retratado como su amigo El Sodoma), Hipatia (su novia Margherita) y Apeles (autorretrato del propio Rafael).

17.12.25

Jugar a soñar despierto es posible. Y no todos somos locos


Luces de conveniencia, cualidad de locura de un loco que ve al revés. Estructura ambigua de respeto, de miedo incluso. Simplemente colores y posicionamiento. Distribución del espacio entre elementos. Tontería para engañarme. De las tonterías propias no se vive, pero alimentan.

15.12.25

Aprender. Expresión. Dedicación, Amor, Profesión. Serenidad. Repartir. Humanismo

Aprender. Poesía. Expresión. Sentido. Dedicación. Amor. Profesión. Observación. Serenidad. Espíritu. Vocaciones. Repartir. Humanismo.


Decía Pablo Serrano en unas pocas líneas todo esto, y pone en ellas todas las palabras que deben motivar el Arte y la propia vida singular de cada uno de nosotros. Caminar y hacer el bien, simplemente. 

Es imposible quedarse con una de esas palabras. Todas son necesarias. Todas son energías de vida, para crear más vida, para empujar la que ya existe. 

Pablo Serrano. Antonio Machado. Miguel de Unamuno. Benito Pérez Galdós. Gregorio Marañón. 

No hay que ir muy lejos para encontrar a los sabios. Estos ya no están, pero sus enseñanzas sí, aunque sean diversas.



10.12.25

Marruecos tiene artistas contemporáneos que debemos conocer


Con Marruecos tenemos problemas de vecindad, de autoestima también, de relaciones mutuas separados por un poquito de mar, y tenemos también relaciones culturales que deberíamos potenciar. 

Por ejemplo en el año 2021 en el Museo de Arte Reina Sofía de Madrid había una exposición sobre Arte de Marruecos que yo recomendé pues creo que es uno de los mayores aciertos en arte contemporáneo de este raro 2021 en España.

Esta obra superior es del artista de la Escuela de Casablanca Mohamed Melehi fallecido hace menos de un año. Nació en el Marruecos español en 1936 y aunque recibió formación artística en España, Roma, Bruselas e incluso en los EEUU, se hizo profesor de Arte en Casablanca creando e impulsado el modernismo en Marruecos, enseñando pintura, fotografía y escultura desde el punto de vista libre de hacer lo que a cada artista le sale desde dentro.

Rompió con la obligación de que todo el arte en Marruecos fuera tradicional, sin que fuera una expresión de cada momento y se moviera como se mueven las sociedades libres.

29.11.25

El Nuevo Mundo de Dvorak visto de noche

Cuando entras en New York por mar, la sensación es la de llegar al Nuevo Mundo como le sucedió a Dvorak o a Lorca. No es mejor, es tan solo recibir la sensación de que llegas al corazón del mundo. 

A veces gripado, otras encantador, siempre diferente, lleno, ocupado y abierto. 

Nunca eres forastero en New York, eres como todos ellos, parte de una sopa de personas que se mueven en un caldo que te arropa. 

Seas migaja o carne, verdura troceada o tropezón de sabor. Si estás, eres.

26.11.25

Murales religiosos como libros abiertos



Lo que vemos en la imagen de arriba es el interior de un monasterio ortodoxo de Rumanía. Hay varios, excelentes todos ellos, y muy bien conservados. Lo de menos en este caso es señalar cual estamos viendo.

El Arte se utilizaba desde tiempos inmemoriales como elemento pedagógico, como herramienta para explicar a los analfabetos, que no sabían leer o no podían leer por no tener acceso a libros escasísimos y muy costosos, lo que se quería enseñar.

Estas paredes interiores de un buen números de iglesias rurales diseminadas por Europa, de las que en muchos países casi no se conserva ninguna, como en España, eran en su interior auténticos libros ilustrados en sus murales, en sus paredes, para poder explicar historias que en cada momento interesaba contar.

Se enseñaba lo que interesaba enseñar. No se conservan por poner ejemplo diferente, murales en donde se enseñara a ser agricultor o ganadero, o buen ciudadano. En cambio sí, ser un buen cristiano, una persona religiosa.

25.11.25

Qué es la Nueva Objetividad o la Escuela Düsseldorf en fotografía?

Vamos a imaginarnos un ejercicio práctico y fotográfico de sencilla explicación. Nos vamos a basar en la Nueva Objetividad, en fotografiar un objeto sencillo, simple, que todos vamos a reconocer enseguida. 

Puede ser el que queramos, aunque si el ejercicio fuera real el monitor nos indicaría qué debemos fotografiar. Por ejemplo unas piezas de tela al corte, como vemos en la imagen de arriba.

Volvemos con la imaginación a ver un puesto callejero en un rastro, donde se venden telas al por menor, al corte. Si estamos una docena de fotógrafos realizando el ejercicio con libertad de elección,y si solo podemos elegir una fotografía, saldrán 12 imágenes totalmente distintas. Los objetos serán los mismos, pero el punto de vista de cada fotógrafo habrá elegido un encuadre, una mirada diferente.

Eso que vemos arriba es simplemente el Arte Fotográfico. 

Esa es en gran medida un ejemplo de la Nueva Objetividad o de la Escuela Düsseldorf de fotografía

¿Y en qué consiste esta Escuela o tendencia fotográfica contemporánea? Advertir de entrada que es ya vieja con sus casi 50 años de vida, para que no creamos que estamos hablando de algo muy novedoso.

Principalmente se basa en fotografías de objetos comunes, realizadas desde un punto de vista frontal, con mucho detalle y como si se lograra que el espectador estuviera viendo de frente lo mismo que decidió mirar el fotógrafo, con un encuadre que selecciona y enmarca el contenido para añadirle o restarle composición

El resultado es un objeto o paisaje simple, sencillo, casi minimalista, con pocos elementos y con espacios vacíos que parece querer decirnos algo más que lo que representa, ayudado por su encuadre y la posición de sus elementos.

Imágenes realistas, casi surrealistas pues llevan un componente diferente en su totalidad, buscando que los objetos hablen sin hablar. 

Imágenes de gran formato, que a veces parecen repetir elementos dispuestos de forma aleatoria, resultados limpios, suaves, que inspiran tranquilidad y que a veces parecen retratos industriales de una época pero que en las últimas décadas se han ido transformando en multitud de posibilidades que se mezclan con otras tendencias artísticas, donde a veces el surrealismo es una de las más claras.

Poner los pies a remojo en las aguas de un arroyo de montaña?

Las imágenes muchas veces vienen al encuentro de los espectadores, queriendo atraparte para que te fijes en ellas. Esta de arriba es una sección de un cartel japonés donde podemos ver a diversas personas de la sociedad antigua japonesa disfrutando de la calma de sus vidas. Un retrato social donde poner en valor simplemente la tranquilidad.

Vemos a un hombre con los pies metidos en un arroyo, mirando a sus contertulios pues nos queremos creer que en aquellos tiempos y momentos, se hablaba y mucho más que ahora. 

El valor de la obra de arte, incluso de la caza fotográfica de esa sección en concreto… radica en la tranquilidad que desarrolla, en la paz tan difícil de lograr ahora. 

¿Cuánto hace que no te pones los pies a remojo en las aguas de un arroyo de montaña o de valle?

18.11.25

El carboncillo es el enemigo de quien comienza en la Escuela de Arte?


Cuando entras por primera vez a una Escuela de Arte, tras las primeras jornadas de ilusión y en donde todo te parece hermoso y muy novedosa tu presencia, viene un periodo largo de dudas y aburrimiento. Y (casi) siempre por el mismo motivo.

Cuando uno entra en una Escuela de Arte, generalmente ya tiene una base mínima, y quiere aprender a una velocidad que no es la que te va a entregar esa Escuela, sea oficial, privada, de autor, especial, etc.

En casi todos los casos es imprescindible cansarte, aburrirte incluso, mientras trabajas en blanco y negro, con carboncillo o lápices, sin que en muchas ocasiones entiendas por qué ese uso que consideras excesivo, con el carboncillo.

En el Arte es fundamental conocer la luz y la sombra. Conocerla, distinguirla en todos sus grados, provocarla, construirla. Sin luz y sombra bien elegidos no hay contraste, volumen, color real.

Aunque luego te vuelvas un Miró.

Las texturas de los elementos que construimos se conforman con esa luz y sombra, y por eso si dominas con el carboncillo el construir decenas de tonos distintos de luces, decenas de graduación en las sombras para que puedan conservar los detalles, pero a su vez profundicen, tienes ya la mitad del camino recorrido.

En una Escuela de Artes empiezas entendiendo de luz y sombra. Y luego de opiniones ajenas.

Necesitas estar rodeados de otras personas que opinan, sean profesores o compañeros alumnos, y necesitas ver, comparar, aprender a base de entender qué hacen otros alumnos como tú.

Lo más sencillo es aprender a manejar herramientas, colores, soportes, técnicas. Lo complejo es perder ese exceso de seguridad con la que entras, para poder mejorar a base de ponerte en duda. Si quieres perfeccionarte, tienes que poner esfuerzo. Y eso casi siempre pasa por ponerte en duda, por dejarte llevar por los profesores que saben más que tú, y por recibir opiniones que irás puliendo.

12.11.25

El aquelarre o Sabbath de Brujas, de Goya


El Museo Lázaro Galdiano alberga el lienzo  "El aquelarre" de Francisco de Goya, pintado entre 1797 y 1798, el cual representa una escena de brujería como una reunión de hechiceras.  También es conocido con el nombre de Sabbath de Brujas. Este cuadro es uno de los seis que Goya pintó para los duques de Osuna, y fue adquirido posteriormente por José Lázaro Galdiano, según indica el catálogo del museo en donde permanece. 

Pintado entre los años  1797-1798. formaba parte de una serie de seis cuadros sobre brujería encargados por los ilustrados duques de Osuna para decorar su palacio de recreo en la Alameda de Osuna (hoy Parque del Capricho, en Madrid).​ Aunque el tema es oscuro, estos cuadros estaban pensados como piezas decorativas de "capricho" para una élite ilustrada que veía la brujería como una superstición popular digna de ser satirizada, no como una amenaza real.​ Hoy nos resulta imposible pensar en decorar nuestra vivienda de recreo con esta temática, pero eran otros siglos.

Esta primera versión es más narrativa y teatral. Luego hizo alguna obra similar para sus Pinturas negras. La composición es más clara y los elementos son más definidos: mostrando al Diablo como Macho Cabrío. En el centro, un gran macho cabrío negro, con cuernos imponentes adornados con hojas de vid (una alusión al dios Baco, el vicio y a lo dionisíaco), preside la ceremonia con ojos brillantes.

A su alrededor, un grupo en círculo de brujas de todas las edades (ancianas y jóvenes) le rinden culto. Su actitud es de devoción y miedo reverencial.​ El tema central es el sacrificio infantil. Una bruja ofrece a un niño vivo al diablo, mientras que otra sostiene a un bebé esquelético, ya "chupado". En el suelo yace otro niño muerto. Esto refleja la superstición popular de que las brujas se alimentaban de niños para crear sus ungüentos mágicos.​

La escena transcurre de noche, bajo una luna creciente que ilumina parcialmente la escena, creando un ambiente de misterio y ocultismo.​ Esta obra, como los grabados de Los Caprichos que Goya, estaba creando en la misma época, y es una sátira contra la ignorancia y las supersticiones populares que los ilustrados como Goya y sus mecenas criticaban. 

No es una celebración de la brujería, sino una denuncia de la credulidad.​ Aunque aún conserva ciertos elementos compositivos del rococó, el dramatismo, el uso del claroscuro y la temática macabra, anuncian ya el Romanticismo. La pincelada es más suelta y expresiva.